Bienvenue

Bienvenido a un repaso de las obras que han removido sentimientos, que se han adelantado a lo vivido... que se han convertido en parte de nuestra vida.

lunes, 29 de noviembre de 2010

Vampiros no crepusculares (I)


Imagino que el acercamiento que tienen ahora los más jóvenes al mundo vampírico pasa por la saga de Crepúsculo, a cuya lectura o visionado no me he asomado- bueno, lo confieso, vi la última hora de la primera película-. En mi caso fue a través de la radio y de los por aquel entonces programas minoritarios de madrugada en los que bajo el término de "paranormal" se abordaban todo tipo de hechos, leyendas y mitos, que más tarde harían famoso a Milenio 3.

En mi mente infantil se fue modelando la figura del vampiro, piel casi transparente, blanquísimo, enigmático, seductor y, ante todo, con un irresistible poder de atracción a pesar del miedo que despertase. Y esa ambivalencia de atracción-temor me llevó a solicitar a mi progenitora un librito delgado de tapas rojas titulado El expreso de los vampiros, un inocente libro de la colección Elige tu propia aventura de la editorial Timun Mas. Jamás había experimentado tanto miedo con un libro, tendría unos nueve años y cada día, al ponerse el sol, continuaba con una lectura que me veía obligada a detener cada vez que los acontecimientos se precipitaban y el Conde Zoltán y la princesa Carmilla hacían acto de presencia.

Años más tarde me tropecé de nuevo con ese nombre de mujer, Carmilla, esta vez en el espacio radiofónico Historias, donde se leían, sin apenas la intervención de efectos sonoros, libros del tipo: Frankesntein, El hombre invisible, La bella y la bestia, Otra vuelta de tuerca...
En esta ocasión el protagonista toma el artículo la y se verá atraída por la joven e inocente Laura. Esta novelita de Le Fanu, le serviría a Bram Stoker para inmortalizar algunos de los momentos más inquietantes de su Drácula, como cuando el enamorado Harker ha de vérselas con un grupo de "vampiresas".
Pero ahondar en el mundo vampírico es harto complicado porque un clavo saca a otro clavo, en el sentido de que indagando un poco en cada autor éste estará conectado a otras obras vampíricas previas, en las que se habría inspirado, y posteriores, en las que se habría infiltrado.
En el caso de Le Fanu, éste se habría servido de Polidori, médico personal de Lord Byron, y de su relato El Vampiro ( recomiendo enérgicamente la película Remando al viento de Gonzalo Suarez, para conocer cómo se gestó este libro así como la obra cumbre de Mary Shelley- y por otra parte para ver los inicios de Hugh Grant y Liz Hurley)


Carmilla, El Vampiro y Drácula pasaron con el tiempo al formato del celuloide, pero esa ya es otra historia que continuará.

2 comentarios:

  1. Enhorabuena por tu nuevo artículo. Ya esperábamos impacientes una nueva entrada en este estupendo blog. No comparto tu gusto por los vampiros, pero aún así es interesante descubrir tus vivencias alrededor de ese mito.
    Hasta la próxima.

    ResponderEliminar
  2. Donde este Blade :D jajajaja

    Na, en serio http://es.wikipedia.org/wiki/Mundo_de_Tinieblas

    ResponderEliminar